EN LA ESCUELA:
CIRCUITOS EN LOS PASILLOS
Con pocos materiales e imaginación podemos dar utilidad a los pasillos de nuestro centro.
Estamos acostumbrados a ver circuitos similares (con distintos niveles de dificultad) en el espacio del recreo, en el gimnasio o en el pabellón del colegio, con aros de plástico, banderines, pelotas, figuras geométricas de psicomotricidad, colchonetas, etc.
Pero, ¿por qué no llevar a cabo un proyecto de circuitos de regulación en diferentes espacios del centro educativo como son los pasillos los cuales puedan usar los alumnos de manera individual y/o grupal, compartiendo una actividad lúdica y de aprendizaje?
Asimismo, estos circuitos pueden tener distintas funciones y beneficios: como veremos en las siguientes fotografías, trabajamos la motricidad gruesa y la integración sensorial dando saltos, caminando sobre una línea de colores, saltando de cuclillas sobre nenúfares imitando a las ranas, cambiando de dirección, caminando despacio o rápido, gateando, colocando nuestras manos en la pared, etc. También, podemos incluir actividades más curriculares como saltar sobre dibujos que tengan números o letras, ir recogiendo objetos entre todos para, después, en el aula, llevar a cabo una tarea conjunta, etc. Igualmente, la propiocepción, la atención, la coordinación, la regulación conductual, las relaciones y habilidades sociales,... (además, en este momento en el que no podemos permitirnos el contacto físico o determinados juegos colectivos con o sin objetos,...)
Son muchos los aspectos que no podemos olvidar, por su importancia, en el desarrollo de nuestro alumnado.